Trance
Trance
El Trance es un género dentro de la música electrónica compuesto por sonidos sintéticos,
acordes largos con ataque y caída lentos, atmósferas, arpegios, en ocasiones sonidos ácidos,
base rítmica de percusión y graves y melodías muy elaboradas.
Suele tener una frecuencia de percusión mayor de 130 BPM, las melodías son largas y evolucionan a lo largo del tiempo. Es habitual la polifonía.
En la composición de este estilo de música se suelen utilizar diversos efectos acústicos, como el eco, la reverberación, la distorsión, el flanger, el delay y el filtrado. Estos efectos son aplicados a los acordes, a la melodía y a la percusión.
Historia del trance
Sven Väth fue uno de los pioneros en este estilo de música, además el club The Omen en la ciudad de Fráncfort, fue el núcleo central de nacimiento y difusión del género, hacia principios de la década de 1990. Nace como una derivación del techno, situando los primeros esbozos de este movimiento en Alemania, en la ciudad de Fráncfort, los primeros productores importantes tienen su base en Alemania: Jam & Spoon, Dance 2 Trance, Oliver Lieb, Paul van Dyk o Cosmic Baby.
Los sellos discográficos que difundieron este nuevo género fueron MFS, hogar de Mijk van Dijk, Humate, Paul van Dyk, Cosmic Baby o el proyecto común de estos dos últimos, Visions Of Shiva, o Harthouse y Eye Q, creados por el propio Sven Väth, que acogió también a gente como Hardfloor, Arpeggiators, Marco Zaffarano, y donde se publicó un álbum fundamental como An Accident In Paradise (Eye Q, 1992), donde se encontraba un single básico para entender el género, L’Esperanza.
Otros tracks pilares de este período son Jam & Spoon – Stella y el maxi que lo contenía, Tales From A Danceographic Ocean (R&S, 1992), Humate – Love Stimulation (MFS, 1993), Cosmic Baby – The Space Track (MFS, 1992) o Energy 52 – Café del Mar (Eye Q, 1993).
Otra corriente del Trance tuvo sus orígenes en el año 1991, este sonido nace de las influencias del progressive y psychedelic rock de los 60´s y 70´s, esto junto a la búsqueda de emular los sonidos del Acid House con las viejas máquinas que tenían, instrumentos milenarios y la enriquecida cultura del continente asiático, dio como resultado un sonido totalmente distinto, al cual bautizaron como Goa, en honor al lugar que habitaban. Este sonido hipnótico, seguramente el más elaborado del género, permitía a la gente “viajar”, creando sensaciones atmosféricas que envolvían a las personas y la situaban en sintonía con su entorno. Uno de los principales impulsores de este sonido fue Goa Gil, quien organizaba las “Full Moon Parties”.
La atracción que produjo este sonido nuevo y fresco fue tan fuerte, que un pionero de la escena acid house inglesa, Paul Oakenfold, abrazó el género y de paso crearía Perfecto Records, donde se refugió Man With No Name.
El Psychedelic, a juicio de muchos, no es nada más que el Goa con otro nombre, ya que al estar tan popular en una época, los sellos buscaron la manera de diferenciarse de lo que estaba de moda y rebautizaron como Psychedelic.
El Full On, nace en el nuevo milenio y que acelera los beats del Goa y le quita un poco de melodía, agregando sonidos sintéticos y líneas de bajos muy potentes, llenando todas las frecuencias del sonido.
También esta la corriente del Progressive, que tiene sus principales cultores en los países Escandinavos y Alemania, el cual tiene toques del Dub y el Dream Trance, bajando los beats y progresando en su estructura, como dice su nombre. Con figuras como Vibrasphere o Son Kite.
Otro género, de rápido ascenso y fulminante desaparición, fue el Dream, donde se destacó el productor italiano Roberto Concina, más conocido como Robert Miles. Este con su álbum Dreamland de 1996 y el clásico, Children, consiguió golpear no sólo la escena trance sino toda la electrónica. Un sonido fresco y melódico, de tintes épicos, que rápidamente encontró el favor del público y otros autores dispuestos a seguir el camino marcado, como Nylon Moon o Zhi-vago. La mayoría de ellos fueron grupos de un solo hit, su influencia se puede seguir en la posterior evolución del trance más melódico, como el Deep, a la vez que se le debe considerar parte integral del sonido conocido como Nu-nrg, base para el desarrollo posterior del Uplifting Trance hoy predominante en Europa.
En 1996, Paul van Dyk publicó el disco Seven Ways, álbum fundamental para muchos en la evolución del Trance y su posterior masividad en el público europeo. En él se incluían temas hoy ya considerados clásicos como Beautiful Place, Forbidden Fruit o Words, que junto a su anterior largo, 45RPM, que incluía For An Angel, marcaron la pauta de gran parte de la producción Trance posterior junto otros Emmanuel Top y Kosmo Records y sellos como Platipus y artistas como el propio dueño de este sello, Simon Berry, conocido por sus aliases Art Of Trance y Union Jack.
Otro movimiento predominante a mediados de la década ése es el Hardtrance. Se trata de otro subgénero que tiene su cuna en Alemania, en Fráncfort, donde destacan productores como Pete Namlook y Pascal F.E.O.S., la entrada en escena de Hamburgo, donde se encuentra un puntal básico como Tunnel Records. Éste fue el sello que editó los primeros trabajos de X-Dream, puente fundamental entre el trance de club y la incipiente escena Goa. Tunnel se convirtió, junto a EDM y Fog Area y con permiso de Noom Records, en la principal referencia del hermano más duro del trance, que encumbraría a artistas como Commander Tom y su imprescindible Are Am Eye (Noom Records, 1995), Cocooma, DJ Dean o Gary D, todos ellos fuertemente influidos por la escena techno belga y, fundamentalmente, el new beat, de la que directamente salió gente como Marco Bailey y toda la prole del sello Bonzai. Temas fundamentales para entender este género son Jones & Stephenson – The First Rebirth (Bonzai, 1993), Legend B – Lost In Love (Sub Terranean, 1994) o Nexus 6 – Tres Chic (Noom Records, 1994).
El Hardtrance dominó toda la escena en el período que va de 1995 a 1998. A partir de entonces la escasa calidad de las producciones es evidente, lo que provoca la desaparición del género, el cual se divide en dos. Por un lado, la línea que deriva hacia el Uplifting Trance; por el otro, el sector más duro, que da origen al movimiento hardstyle, más cercano al Hardcore.
A partir de 1999 un grupo de productores y Dj’s holandeses, con DJ Tiësto, Ferry Corsten y Marco V a la cabeza. Todos ellos proceden del todopoderoso Hardcore Orange que se desarrolló desde Rotterdam e irradió toda Europa a principios de los 90.
Temas como System F – Out Of The Blue, Veracocha – Carte Blanche o Gouryella – Gouryella fueron la piedra angular que configuró el primer sonido Uplifting, que es el más paradigmático de todo el género. El verano del 99 fue importante porque estos Dj’s y otros como Armin van Buuren arrasaron en las pistas de Ibiza, pasando por encima de algunos como Judge Jules, John ‘00’ Fleming o Paul Oakenfold.
Su estilo más comercial fue rechazada por Dj´s como John Digweed y Sasha, que se pasaron al Progressive House, definido básicamente por un sonido menos acelerado y unas melodías más elaboradas. Todos los artistas que estaban bajo el alero del sello Global Underground, se pasan al Progressive House, manteniendo la búsqueda de nuevas sonoridades progresivas. La inclusión de los Breaks en el último tiempo, le ha dado nuevos bríos con gente como Sander Kleinenberg, Matthew Dekay, Luke Chable, Infusion, Steve Porter, entre otros.
El sonido Trance sigue evolucionando, va tomando nuevos rumbos, conquistando nuevas audiencias, mezclándose con referentes culturales de todas partes del globo, creando nuevas formas.
Actualmente es el estilo más popular y comercial del género electrónico, con destacados artistas como DJ Tiësto o Paul van Dyk. los productores más importantes provienen de Holanda y Alemania , tales como DJ Ton TB, Cor Fijneman, Kai Tracid, Marco V, Matt Darey, etc.